Más de diez años después, el crossover de lucha entre Marvel y Capcom regresa a las consolas con un nuevo episodio disponible tanto en PlayStation 3 como en Xbox 360.
Ahora que el género de la lucha parece haber recuperado su momento de gloria, Capcom ha visto bien traer de vuelta una de las sagas que más fans han acumulado a lo largo de los años: el cruce de luchadores entre su compañía y la editorial Marvel. Esta saga, que se convirtió con su segunda entrega en uno de los juegos más espectaculares del género, es 10 años después todavía recordada por los fans del género. En Marvel vs. Capcom 3: Fate of Two Worlds, Capcom hace uso de la tecnología más actual para actualizar su juego de lucha e intentar convertirlo en el referente actual. Al mismo tiempo, actualizan la propuesta jugable con el objetivo de encajar con los intereses del público actual y con las demandas de este.
JUGABILIDAD
El sistema de combate de Marvel vs. Capcom 3: Fate of Two Worlds se inspira en el de las anteriores entregas, volviendo a centralizar el interés de los e
nfrentamientos en las supermagias y las combinaciones de golpes rápidos y aéreos. Hay nuevas funcionalidades, como combinaciones aéreas que incluyen cambio de personaje en el propio aire para seguir golpeando a los rivales, o el modo X-Factor, que nos permite potenciar al personaje de forma muy activa. No obstante, la mecánica se mantiene muy fiel, con enfrentamientos de tres contra tres en los que podemos solicitar la ayuda de los luchadores que estén en el banquillo o de llamarles para hacer hypers combinados. También podemos cambiar de compañero, con el objetivo de que quien esté herido descanse, y realizar combinaciones cruzadas muy espectaculares.
Capcom ha equilibrado a los personajes para que existan diferencias entre ellos, pero que al mismo tiempo no resulte una gran diferencia entre manejar a uno u otro en la práctica. Eso sí, es obvio que hay diferencias, especialmente en lo relacionado con la fuerza, la resistencia, y la velocidad. La selección de luchadores es de menor cantidad a la de Marvel vs. Capcom 2, pero ha
y que reconocer que los personajes son más variados que los del anterior episodio. Hay menos clones entre sí, aunque también es justo decir que la selección de luchadores, en algunos casos, no satisfará a todos los jugadores. Por ejemplo, hay personas que choca que estén incluidos, y otros que se echan de menos de manera bastante destacable. En el caso de Capcom, la compañía ha optado por introducir a la mayor parte de héroes que todavía están de actualidad, sin repescar a luchadores menos recordados. Por suerte, hay un poco de todo, y la clara demostración de ello es que Sir Arthur está jugable por primera vez en la franquicia. Otra particularidad es que Capcom ha dado carpetazo a los luchadores originales que se sacó de la manga en el episodio precedente, y muy posiblemente nadie les echará de menos. Por el lado de Marvel, se ha incluido a la mayoría de héroes y villanos que han aparecido recientemente en los cines, además de algunas presencias obligadas según los índices de popularidad actual, como Deadpool (Masacre), que también llegará al cine próximamente.
El sistema de combate y la selección de personajes convencen, pero el planteamiento jugable de Marvel vs. Capcom 3: Fate of Two Worlds tiene algunos def
ectos. Parece que de alguna manera en los últimos años los juegos de lucha se centralicen especialmente en los modos online, y dejen de lado las demás opciones, sobre todo las monojugador. Con la adaptación de Marvel vs. Capcom 2 para servicios de descarga (PlayStation Network, Xbox Live Arcade) ya ocurrió, y ahora la desarrolladora ha cometido de nuevo el mismo error. Al margen del modo arcade, donde vamos avanzando a través de rivales de dificultad progresiva hasta luchar contra el jefe final, no hay mayor incentivo para partidas monojugador. El modo misiones incluido es meramente anecdótico, dado que resulta difícilmente imaginable que podamos sentir atracción por llevar a cabo movimientos simples y básicos para ganar unos cuantos puntos. Por suerte, el juego, en su modo arcade, incluye finales para todos los personajes, así que al menos tendremos el incentivo de acabar la partida con todos ellos para desbloquearlos (el que le da el último golpe al jefe final es de quien veremos el final). También, eso sí, hay un buen número de elementos desbloqueables, como piezas de audio, niveles, imágenes de arte, y modelos, pero todo es demasiado frío y automático. En relación a personajes desbloqueables, sólo hay cuatro, y nos haremos con ellos con un par de partidas. 
En comparación al Marvel vs. Capcom 2 original de Dreamcast, que tenía una adictiva tienda donde hacer compras de desbloqueables, este nuevo título queda muy por detrás.
Si nos introducimos en el modo online y lo nuestro es jugar contra otros usuarios, ahí sí que vamos a encontrar jugosas opciones. Tenemos una tarjeta de jugador donde quedan registrados todos los movimientos que llevemos a cabo: derrotas, victorias, número de veces que hemos usado cada luchador, nuestro estilo de combate, etc. Podemos unirnos a salas de combate rápido, o a lobbys donde encontrarnos con otros jugadores para dar paso a rondas de enfrentamientos. El sistema online es efectivo, eso es indudable. No obstante, a estas alturas, cuando los juegos de lucha se esfuerzan por ofrecer contenido adicional para justificar su adquisición, el título de Capcom se muestra excesivamente vacío.
GRÁFICOS
Capcom se ha apoyado en la última versión del motor MT Framework para crear u
n estilo gráfico nuevo y propio, bastante espectacular en todos los sentidos. Los personajes tienen un remarcado carácter de comic, alejándose de la estética del anterior producto, pero ganando un valor adicional en cuanto a la representación de los héroes y villanos de Marvel. Sus animaciones son complejas y adaptan perfectamente a los personajes que ya conocemos, actualizando sus movimientos y manteniendo todas sus acciones habituales. Con sólo ver la cantidad de pequeños detalles y animaciones de los que disponen algunos personajes se puede apreciar el gran trabajo realizado por Capcom. Otro elemento que merece ser destacado es la variedad de los escenarios y lo vivos que resultan, estando en constante movimiento y contando con multitud de pequeños detalles. El nivel del Daily Bugle con los edificios por el fondo, y montones de curiosidades (podemos ver incluso el rótulo de la oficina de abogados de Daredevil), o el escenario de Sir Arthur, son buenos ejemplos de la calidad de los escenarios. También destacan los efectos de los ataques más especiales, que llenan la pantalla con ondas de energía varias.
MÚSICA & SONIDO
Capcom nos da la posibilidad de escuchar las voces en japonés o en inglés, lo que es una muy buena noticia para los jugadores más exigentes. Si hay una voz que nos gusta en japonés, pero todas las demás en inglés, podemos definir cuáles escuchar en cada idioma, lo que resulta muy curioso. La banda sonora es de lo más activa y acompaña perfectamente, incluso contando con porciones vocales que ambientan de forma estupenda. Teniendo en cuenta lo extrañas que eran las canciones del episodio precedente, este resultado nos deja más que satisfechos. Por su parte, los efectos y los golpes suenan con mucha contundencia.
CONCLUSIÓN
Marvel vs. Capcom 3: Fate of Two Worlds es un juego de lucha de primerísimo nivel, que engancha y que tiene un sistema de combate espectacular. Los defectos jugables con los que cuenta son reducidos, pero la carcasa en la que Capcom ha englobado el juego resulta un poco inconsistente, lo que sin duda es una pena. Aún así, es uno de los mejores juegos de lucha disponibles en el catálogo de las consolas actuales, y esperemos que no tardemos otros diez años en encontrarnos con otro episodio de la franquicia.
18/02/11 | 
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